Comentarios sobre el artículo “La situación económica, social y política desde 2003” de Alberto Wiñazky.

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dossier: debate (2 de 6)

Ignacio Paz*

“En mi opinión, la difusión de las categorías ecónómicas del marxismo,y del modo de producción capitalista es elogiable. En ese sentido  el trabajo representa una contribución importante con  conocimiento y fundamentación teórica y bibliográfica. Pero también creo que la conceptualización de un tipo de superestructura político ideologíca en un momento histórico determinado y en una realidad concreta, solamente a partir del análisis de la estructura económica dominante, es cuanto menos incompleta.”

Quisiera hacer algunos comentarios  , respecto del trabajo de Alberto, ¨ La situación económica, social y política, desde 2003¨  aparecido en el último número de la revista.

Sé que seguramente repetiré conceptos por todos nosotros conocidos, pero dada la importancia de este artículo creo que es necesario  puntualizar en algunos conceptos, que creo medulares en la situación política actual del país.

Elogio el esfuerzo teórico realizado, su fundamentación bibliográfica y sistémica,  al analizar la   estructura económica argentina y su superestructura

Pero quisiera polemizar en lo que entiendo son enunciaciones o caracterizaciones de fuerte crítica, del gobierno kirchnerista presentadas a través, o como conclusión de premisas de  teoría económica aplicadas a una realidad dinámica, compleja y excepcional como la vivida por los argentinos en los últimos 10 años.  Análisis de una realidad para lo cual hacen falta conceptualizaciones políticas necesarias de ser tenidas en cuenta a la hora de una categorización de un proyecto, que entiendo como nacional y popular.

Algunas observaciones teóricas:

El trabajo tiene por objeto la crítica del kirchnerismo  su caracterización  y una opinión valorativa de su gestión de gobierno, desde una mirada de teoría económica y más cerca de una posición maximalista

En mi opinión, la difusión de las categorías ecónómicas del marxismo,y del modo de producción capitalista es elogiable. En ese sentido  el trabajo representa una contribución importante con  conocimiento y fundamentación teórica y bibliográfica.

Pero también creo que la conceptualización de un tipo de superestructura político ideologíca en un momento histórico determinado y en una realidad concreta, solamente a partir del análisis de la estructura económica dominante, es cuanto menos incompleta.
Esta polémica metodología  ha sido motivo de debate, discusiones, litigios y hasta fracturas históricas dentro del conjunto de pensadores y partidos marxistas a nivel internacional, cuando se ha tratado de analizar una situación política concreta, para decidir alianzas, apoyos electorales, etc.

Para los fundadores del materialismo histórico y la economía política marxista, un Estado o conjunto de estados simbolizan  una  Formación económico-social  que representa la compleja conjunción de distintos tipos y niveles de coexistencia entre  relaciones sociales de producción diversas  y en consecuencia distintos tipos de posiciones político ideológicas en una misma  superestructura.
Al mismo tiempo se ha agregado que siempre determinadas relaciones sociales son las predominantes y que ellas generan una forma predominante de concepción político ideológica.

Entiendo que quizás hoy , más después de experiencias históricas dramáticas y  liberados de “ recetas y dogmas infalibles” , podamos reconocer que incluso la categorización de “ modos dominantes ,  clases dominantes, o relaciones dominantes, tiene una impronta de falibilidad histórico-fáctica.

Ya a principios del siglo XX cuando los clásicos del marxismo pronosticaban la ineluctabilidad de la revolución socialista en  los países capitalistas de mayor grado de desarrollo económico , Lenin “ contrariando” ( o enriqueciendo) la teoría fundamentó el concepto de “ eslabón más débil de la cadena imperialista” para explicar el porqué la Rusia zarista era el lugar y 1917 el momento para intentar “ el asalto al poder” y la revolución socialista.

En los procesos emancipatorios latinoamericanos de nuestros dias,  asistimos a cambios importantes en el nivel de vida de los pueblos, de su conciencia política y sus paradigmas sociales. La aparaición de líderes de distinta extracción (militar en Venezuela, economista en Ecuador,  obrero en Brasil, campesino en Bolivia, burgués nacional en Argentina) ha venido a introducir modificaciones fundamentales en determinadas concepciones teóricas, acerca del concepto de partidos de vanguardia, alianzas estratégicas, ideología de clase, etc.

Es decir que se dan, procesos de tendencia emancipatoria para las mayorías populares, en países con relaciones de producción capitalistas en su estructura económico social  y con cambios progresistas en su superestructura política que apuntan a mejorar la distribución del ingreso y la riqueza social así como las desigualdades de todo tipo, sin plantearse revoluciones socialistas (salvo el caso de Venezuela)

No obstante, dialécticamente hablando, podemos decir que estos procesos no afectan al capitalismo existente en cada uno de estos países ¿?

En mi opinión, en el artículo, las opiniones políticas sobre el gobierno se desprenden del análisis de la estructura económica y de la permanencia en ella de la dominancia de los grupos concentrados de la economía,y de la caracterización teórica del rol del Estado. Pero estas conclusiones adolecen de cierto mecanicismo y no prevalecen en ellas el análisis de las mejoras introducidas en la economía, en la política, en la lucha por los derechos humanos, en la política exterior del país, en su rol protagónico en la región. En síntesis, en la vida de los argentinos.

Como comentario menor y al margen, el artículo se inicia con una expresión de “ régimen implementado en el país a partir de 2003…” expresión lingüística correcta si se quiere hablar de “ formas políticas implementadas” , pero que en nuestro argot de usos y costumbres políticas, suena más a descalificación que a caracterización, ya que así hemos llamado históricamente a los sucesivos gobiernos militares, fácticos de derecha, antinacionales y antipopulares.

Se dice en el segundo bloque que este “ neodesarrollismo”  fue  la respuesta del sistema a la crisis de acumulación originada por el importante ascenso de las luchas sociales”.
Desarrollismo ?
En principio el  “desarrollismo” en Argentina se ha caracterizado por plantear y estimular una renovación de las fuerzas productivas, sobre todo industriales y del sector I de la economía, pero sobre la base de propender a un fuerte endeudamiento externo y con un régimen de inversiones extranjeras absolutamente “ neocolonial” con pérdida del poder de soberanía nacional y “ libertades irrestrictas para el flujo de capitales, y  su desgravación fiscal.
No pareciera ser ese el modelo que implementa el kirchnerismo,

Respuesta del “sistema” a la crisis de acumulación ?
La observación acerca de las considerables ganancias del sector oligopolíco dominante en la economía pareciera obvio si consideramos que en las condiciones de dicho oligopolio sobre los medios de producción, todo aumento y expansión del consumo doméstico a través del aumento del poder de compra de la población, además de satisfacer las necesidades postergadas de estos sectores, depara ganancias para los propietarios del capital, ineludiblemente.

Puede considerarse “ respuesta del sistema…” a una política de redistribución de ingresos, con aumentos salariales  y su derivación en aumento del mercado doméstico, un “ respuesta del sistema” ?
Puede ser una política de reinvindicación de los derechos humanos, de propensión al juicio y castigo a los responsables de los crímenes de lesa humanidad habidos en nuestro país, una actitud firme en defensa de la soberanía ( Malvinas, ONU, MERCOSUR,etc),   puede considerarse  todo esto una  respuesta del “ sistema a la crisis de acumulación…” ?
O sería más bien directamente lo contrario.  No sería más bien una respuesta a favor de los sectores populares antagónicos al sistema ¿? .

“ Respuesta del sistema “ Sí, es la manera en que los gobiernos de derecha en Europa enfrentan la crisis capitalista profundizando las desigualdades,la desocupación y la miseria, con las recetas neoliberales que dieron origen a la crisis. El “sistema”  no sale de las crisis por el camino de la ampliación del mercado, de los salarios y de los derechos sociales.
No fue esa la respuesta del “ régimen” kirchnerista. En todo caso tendríamos que coincidir en calificar de “ heterodoxas” al conjunto de medidas implementadas.

Se dice en el siguiente bloque que “ No se produjo una transformación en el paradigma de acumulación del capital que la dictadura había impuesto desde 1976…”  En mi opinión el paradigma de acumulación impuesto por el plan Martinez de Hoz y llevado adelante por la dictadura con crímenes, desaparecidos y terror, fue absolutamente otro.
acumulación básica a traves de la valorización financiera  del capital.
A través de la apertura indiscriminada de las importaciones en base a una paridad cambiaria ficticia, sostenida por un aumento creciente, irresponsable y delictivo de la deuda externa.
Círculo de acumulación que tenía un costado externo con ingreso de capitales golondrinas colocados en pesos a tasa de interés ampliamente superiores a la internacional y reconvertidos a divisas periódicamente en base a la tasa de cambio fija, y emigrados libremente. Luego vueltos a introducir.
Y un costado interno, con altas tasas de interés bancario que atraía la colocación en pesos y desalentaba la inversión industrial, por lo que se achicaba el mercado interno, caían puestos de trabajo y por ende el poder de consumo de los trabajadores y la rentabilidad  de los grupos concentrados de la economía se hacía conjuntamente con las ganancias producidas por un mercado más chico, pero con salarios más bajos, con la introducción masiva de importados  y además con la rentabilidad financiera del excedente.
Déficit crónico de la balanza comercial (mayores importaciones que exportaciones ) y del presupuesto nacional (mayores erogaciones básicamente intereses de la deuda externa e interna) que se compensaban con entradas de capitales y un “ festival de bonos” que secaban el mercado ofreciendo altas tasas de interés.
Cierre de industrias, traslado a Brasil de numerosas empresas y avance creciente del capital extranjera via compra de empresas nacionales.
Liquidación de empresas públicas ( telefonia, gas, agua, aeronavegación,petróleo, etc) entregadas al capital extranjero

Y podríamos seguir la enumeración.  Este es el escenario del proyecto Kirchnerista, para que se diga que no se produjeron modificaciones en el paradigma de acumulación impuesto por la dictadura del 76 ¿?

Es que acaso desde 2003 en adelante el patrón de acumulación del capital no ha sido tortuoso, errático y atípico ¿?

Con un inicio dado con un volumen de capacidad ociosa industrial enorme, que obligó a “ soportar” los aumentos salariales sin aumentos de precios, dada la necesidad de completar un régimen de masa crítica de producción rentable. Que obviamente produjo, como acertadamente suele señalar Alberto, procesos crecientes de lucha intraburguesa a favor de los grupos de capital concentrado, dominantes de los recursos y materias básicas.
Posibilidad inicial de fuga de divisas, tolerada por el gobierno gracias al volumen de reservas conseguido y a los superavits gemelos de los balances comercial y fiscal. Pero luego bruscamente interrumpida, conjuntamente con limitaciones severas al negocio importador, etc.
Estatización de actividades extranjerizadas por el neoliberalismo ( agua, energía, luz, aerolíneas, jubilaciones ) provocando reaccion internacional del capital financiero mundial.
Ni que hablar del mayor default de deuda soberana del mundo que al mismo tiempo que liberó de una carga tremenda al presupuesto nacional y por ende a los ciudadanos del país, generó el enfrentamiento con la comunidad financiera internacional y sus centros de poder (FMI, BM, Club de París )
Puede considerarse esto un patron de acumulación del capital congruente con el plan Martinez de Hoz ¿?

Lo curioso es que en el mismo párrafo, se dice “ …Pero tanto por la aceleración del crecimiento como por la disminución de la desocupación,….aumentaron la generación de valor y resultaron ser muy dinámicos en la creación de empleo y en el aumento del consumo..”
Pero esto fue arte de magia ¿? Pareciera ser algo casual, no buscado, azaroso.

Se dice que  “ …un desarrollo industrial solo sostenido por un tipo de cambio alto, sin una estrategia de desarrollo…” fue anulando buena parte de la competitividad alcanzada”
Desde mi punto de vista, es injusto minimizar un conjunto de medidas y disposiciones que tendieron a estimular el crecimiento del mercado  aunque no hayan tenido la forma de Plan de Desarrollo, tales como:

Instauración de paritarias para la fijación negociada de los salarios y con ello sostener el poder de compra de los trabajadores y por ende el desarrollo del mercado interno
Aumento de la participación de los salarios en la composición de la Renta Nacional, hasta niveles muy superiores a los de décadas anteriores.
Créditos con tasas de interés subsidiadas para pymes y para grandes empresas (Plan Bicentenario) con destino a inversiones productivas
Un amplio sistema de subsidios (para aumentar el salario real y el consumo)
Programas sociales como subsidio univ por hijo y la ampliación de la base del sistema jubilatorio duplicandola
Estatización de las afjp, fuerte impulso para el anses y la participación de este ente como financiador de proyectos sociales

Es cierto que no han aparecido como un conjunto absolutamente armónico, integrado y simultáneo que revista las características de un Plan de Desarrollo Nacional, pero subestimar su importancia, como mínimo , me parece injusto y que conlleva un sesgo político de confrontación.

Como síntesis, para no extenuar y dejando abierta la discusión, quisiera subrayar que es indudable que este proceso Kirchnersita surgido de elecciones post crisis 2001 / 2002 inicialmente con un caudal del 22% de los votos y ratificado en 2011 con un 54%, no se propuso, ni se propone la instauración del socialismo en Argentina.
Es indudable que el esencia del modo de producción capitalista hace que cualquier programa que tienda a estimular el consumo a través de los aumentos salariales y de la participación de los trabajadores en  el crecimiento del mercado interno, conlleva réditos y ganancias a las empresas productoras de bienes y servicios.
Es indiscutible que la concentración de los grupos dominantes en nuestra estructura económica, que no nació con este gobierno, hace que estas ganancias empresarias vayan sobretodo a sus arcas profundizandose el proceso de desarrollo desigual inherente al capitalismo.
Pero la pregunta política por excelencia sería¨ “ Qué hacer” ¿?
Esperamos la revolución socialista que vendría de la mano de algún grupo iluminado que se proclame de vanguardia y que, por lo visto hasta hoy, es ignorado masivamente por el pueblo,y en especial los trabajadors ¿?
Mientras tanto…” cuánto peor, mejor”  ¿?  No habría que preguntar a esos miles, cientos de miles, millones en realidad, de ciudadanos que han iniciado un proceso de mejoras en sus niveles de vida, si estan dispuestos a vivir postergados, o incluso morir de hambre, esperando la revolución ¿?

Finalmente, la inflación como flagelo que está minando la base popular de este gobierno, es casual ¿? Es producida por el gobierno??

Quizás yo diría, sarcásticamente , sí.  Por desafiar a los grupos económicos con una permanente apuesta al salario y al mantenimiento del nivel de vida de los trabajadores, la ampliación de sus derechos, la lucha por mejorar la desigualdad social. Esto ha “ provocado” permanente a los “ formadores de precios”.
Estos han respondido siempre con aumentos de precios superiores a los aumentos salariales, y no han bajado las manos en la pulseada de la “ pugna distributiva”  A cada aumento salarial que en realidad buscaba compensar la inflación habida, se respondió con un nuevo aumento de precios, y así sucesivamente.
Desaparecida la capacidad ociosa y trabajando a pleno, la opción  inversión o aumento de precios, para responder al crecimiento de la demanda, fue precios e inflación.

Han existido seguramente correlación de fuerzas político-económicas desfavorables, incongruencias, debilidades, errores, etc, que determinaron muchas falencias en el accionar gubernamental ( anclaje del dólar excesivo en el tiempo, retraso en medidas que controlen el éxodo de divisas via fuga, turismo, etc, retrasos en el abordaje con fuerza de resolución de la matriz energética, reforma impositiva profunda,etc.)

Pero nuestro análisis debiera ser no sólo de Economía Política. Y la Política en la Economía ’’?.

Cuán fuerte fue este proceso en cuanto a lo popular y nacional, que estos sectores dominantes de la vida económica y comunicacional de la Argentina, pese a las enormes ganancias conseguidas, no toleran a este gobierno y luchan denodadamente para su caída y /o reemplazo electoral.
Esa base económica dominante, tiene su superestructura ideológica y prefieren erradicar este proceso kirchnerista, pese a sus enormes ganancias, y aún habiendo mantenido posiciones de oligopolios dominantes,  porque su objetivo es acabar con este empoderamiento popular, acrecentamiento de derechos y de conciencia social.

Desde mi punto de vista esta fue una década ganada. Ganada para los intereses de los trabajadores y de los sectores populares del empresariado nacional, aunque obviamente, hayan obtenido grandes ganancias los sectores concentrados de la economía por ser los propietarios concentrados de los medios de producción y apropiadores mayoritarios de la plusvalía social .

Es posible que no ganemos una futura elección si el pueblo mayoritariamente acepta la prédica demoledora de los medios masivos de comunicación dominantes.  Pero esta experiencia dejará huellas difíciles de borrar, que deberán ser asumidas por cualquier otro gobierno. Y quizas, más adelante en el tiempo, pueda retormarse este proceso, enriqueciendolo con la corrección de errores cometidos.

Coincido en que este gobierno tiene limitaciones, pero se trata de “ empujar desde adentro” para expandir las fronteras con medidas más profundas.  En este sentido los trabajos de Carlos Mendoza y Gerardo Codina aportan elementos contundentes en esa dirección.

En estos momentos es donde las posiciones se polarizan, y deberíamos cuidar  que objeciones críticas al proyecto nacional y popular desde el ángulo de la “ pureza ideológica de izquierda”  puedan  involuntariamente, llevar aguas al molino no deseado.

*ignacio Paz, economista, miembro de la Comisión de Economía y del Consejo Editorial de Tesis 11.

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