Quita de retenciones al campo: Reflexiones en torno a la política económica de Milei, Caputo y Sturzenegger:

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Rodrigo de Echeandía*

El 22 de septiembre, el gobierno argentino anunció una quita temporal de retenciones a las exportaciones agropecuarias, vigente hasta el 31 de octubre o hasta alcanzar un volumen liquidado de 7.000 millones de dólares, lo que ocurriera primero. Esta medida, presentada como un incentivo para acelerar las ventas externas y la liquidación de divisas, significó una reducción inmediata de los derechos de exportación para los principales complejos agroexportadores.

Sin meternos en análisis qué les corresponderían  a los fueros Penal y Penal Económico, a propósito del acceso a información privilegiada, que benefició solo a algunos de los grandes grupos económicos como BUNGE, DREYFUS, COFCO, CARGILL, MOLINOS, ACEITERA GRAL. DEHEZA, etc. en detrimento de cientos de medianos y pequeños productores.

Según el propio Estado Nacional, las arcas públicas dejaron de percibir, gracias a esta decisión, unos 1600 Millones de dólares. Pero analizando los porcentajes declarados de:

Soja y derivados: 5.600 x 33% = USD 1.848 M

Trigo: 658 × 12 % = USD 79 M

Maíz: 315 × 12% = USD 38 M

Otros cereales: 427 × 12 % = USD 51 M

Total estimado de recaudación no percibida por el Estado Nacional sería de U$S 2000 millones a U$S2100 millones

Pero supongamos que en ésta oportunidad el gobierno de Milei dice la verdad (algo poco probable) y realmente el dinero que el Estado dejó de percibir, son 1600 millones de dólares.

¿Qué podría haber hecho el Estado Nacional con ese dinero?

Si tomamos esa información como cierta,  podemos analizar que esos U$S 1.600 millones que el fisco dejó de cobrarle a los más ricos equivale a tres presupuestos anuales de la UBA.

También, es más del doble de lo necesario para implementar la Ley de Financiamiento Universitario este año. Y es una cifra veinte veces superior a la requerida por la  Ley de Emergencia Pediátrica para el Garrahan.

 Asimismo, con ese monto se podría aumentar:

* 22% la AUH

* 44% el presupuesto para la ANDIS

* 31% el presupuesto anual en salud

* Multiplicar por 55 el presupuesto contra la violencia de género

* 1600 millones de dólares, Es casi la mitad del presupuesto nacional universitario

* Equivale a 7,5 años del Plan Nacional de Vacunación, 

* Es 150 veces más que la inversión en primera infancia y son 5,3 años del FONID (Fondo Nacional de Incentivo Docente)

* También equivale a más del doble del presupuesto de la Policía Federal Argentina y a más de un presupuesto y medio (1,6) de la Gendarmería Nacional.

* En términos macroeconómicos, implica 35% del superávit proyectado para 2026

Y si pensamos que la también vetada ley de aumento a los jubilados, preveía un aumento del 7,2% sobre el gasto previsional anual presupuestado; ese porcentaje de aumento, implicaría un costo adicional de 2500 millones de dólares; casi el total estimado por nosotros que el Estado Nacional dejó de percibir en este regalo a los 8 o 10 exportadores más grandes del agro argentino; todos de capitales extranjeros o cipayos.

Y si resaltamos que entre el Tesoro Nacional y el Banco Central de la República Argentina, en los últimos 60 días, vendieron y/o se fugaron alrededor de 2100 millones de dólares más, perfectamente con ese dinero el Estado Nacional,  podría haberle dado a los jubilados, a las universidades, al Garrahan, a los discapacitados, a los enfermos de cáncer y al resto de sus necesidades en salud, educación y seguridad todo el presupuesto que necesitan, en vez de despilfarrarlo, a través de la timba financiera, el subsidio a los grandes exportadores sojeros multimillonarios y al “dólar barato”.

Si dejamos nuestro destino en manos del Mercado, los únicos privilegiados seguirán siendo los que detentan el Poder Económico Concentrado y perjudicados los “ciudadanos de a pie” condenados a trabajar para sobrevivir.

“¡LA ECONOMÍA NO ES LIBRE! O La controla el Estado en beneficio del Pueblo o lo hacen los grandes grupos económicos en perjuicio de éste.” Juan Domingo Perón

*Rodrigo de Echeandía, abogado, miembro del Consejo Editorial de Tesis.

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